El pasado festival de Sitges me quedé sin ver esta joya del cine de animación, y hace poco la vi por fin, quedando gratamente sorprendido, no sólo por su calidad, sino por su argumento lleno de imaginación, fantasía y emotividad.
Oblivion Island nos narra la historia de Haruka, una joven de 16 años que ha perdido recientemente a su madre, la cuál le contó cuando era pequeña un cuento acerca de unas criaturas similares a los zorros, que se llevaban los objetos olvidados por los humanos a su mundo, pero que devolvían a cambio de un presente y oraciones. Haruka recibió aquel día un bonito espejo de mano de su madre, pero con el tiempo se olvidó de él, hasta que un día decide buscarlo donde lo dejó, pero el espejo ha desaparecido misteriosamente, por lo que Haruka decide rezar en un apartado altar a las criaturas para que se lo devuelvan. Pronto se encontrará accidentalmente con Teo, un extraño individuo que lleva una máscara con la forma de la cabeza de un zorro...
La película y su melodía es preciosa, y no es de extrañar teniendo en cuenta que detrás de ella se encuentra el estudio I.G. Production, responsable de obras magníficas como las series de anime Ghost in the Shell, FLCL, xxxHolic o Blood+, y películas como The End of Evangelion. Y debo destacar además que en la película salen unas criaturas muy parecidas a los personajes del Little Big Planet...
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