El Curioso Caso de Benjamin Button

Una fábula sobre la vida misma. Eso es lo que ha desarrollado David Fincher (Seven, Fight Club, Zodiac) a partir de un relato de tan sólo 11 páginas. Una labor increíble del guionista, pero también del director, que en esta película ha cambiado bastante en el estilo más oscuro que nos tiene acostumbrados, haciendo una película se esas que son bonitas y emotivas de ver, un cuento asombroso como su protagonista, un hombre que nace siendo un anciano y que como él dice "mientras los demás envejecían, yo me hacía más joven". Benjamin está encarnado por Brad Pitt, un actor que ya ha hecho muchos papeles importantes y que ha demostrado que es un gran actor, no solo una cara bonita, por eso creo que han elegido al ideal para este personaje, aunque tampoco es que haya una actuación sobresaliente, y no olvidemos que Cate Blanchett (me encanta esta actriz, ¡capaz de ser Galadriel y Bob Dylan nada menos!) está ahí también haciendo de Daisy, un papel inverso al de Pitt, y la actriz se adapta perfectamente a cada edad. No hay que olvidarse tampoco de otros actores que aparecen, como Julia Ormond, Jared Harris (el "artístico" Capitán Mike al que ahora vemos en un inquietante papel en la serie FRINGE) o Tilda Swinton.

La película dura casi 3 horas, pero recordemos que nos cuentan toda una vida, por lo que al ocurrir tantas cosas se pasan volando. Tiene sus ratos de humor (los rayos, los ancianos, el capitán), y aunque en general es una película dramática, y es previsible su final, lo que más importa es el viaje, el transcurso de toda la historia. Una historia que nos enseña que no hay edad para el amor, que nos hace ver que cuando se ama totalmente y de verdad a alguien eso no influye en la distancia, el tiempo o incluso que se vayan conociendo a otras personas durante los años. Ese amor sigue ahí. Me resultó especial el momento "vivíamos prácticamente en ese colchón", porque es cierto que cuando se está enamorado y eres correspondido el entorno es lo de menos, la vida es maravillosa día a día.

En cuanto a hacer cosas en la vida, tampoco hay edad. Me encantan varias frases de la película:, que causan momentos lagrimilla como por ejemplo:

"Nunca es demasiado tarde o pronto para ser quien queremos ser".
"Algunas cosas, nunca las olvidas".
"Nunca sabes lo que te sucederá".
"La vida no se mide en minutos, se mide en momentos".
"Amarte, hace que todo merezca la pena ".

Así que ya sabéis, si queréis hacer algo, viajar a algún lugar, conocer a alguien, si tenéis algún proyecto, sueños, ambiciones, aspiraciones... Id a por ello, pero no os preocupéis demasiado si no lo conseguís inmediatamente. Siempre hay tiempo para lo que importa.