Lo primero que hay que decir sobre esta película con Keanu Reeves y Jennifer Connelly es que es un remake de la película de mismo nombre del año 1951, The Day The Earth Stood Still. Y aunque hay bastantes similitudes, lo cierto es que la nueva versión va por otros derroteros más ecologistas, tan de moda hoy en día...
La historia gira en torno a la visita de un alienígena acompañado de un enorme robot a la tierra, dispuesto a dar un importante mensaje a la humanidad. Pero claro está, los humanos, que hemos visto ya muchas películas de aliens invasores y encima somos desconfiados por naturaleza, nos pensaremos lo peor sobre las intenciones de esta visita... Y quién sabe, a lo mejor por una vez las paranoias no son infundadas.
La película entretiene bastante, pese al desarrollo pausado y corta duración, Reeves es tan inexpresivo como siempre, ideal para el alien que interpreta, pero tiene ese algo que se llama "presencia en pantalla", es decir, que no será buen actor pero que resulta creíble y con cierta carisma. Connelly está cada año más guapa y eso no puede ser porque la mujer ya tiene unos añitos, en esta película no destaca especialmente pero como es buena actriz deja su huella, algo que también hace la gran Kathy Bates, en un papel idóneo para Hillary Clinton :P Los efectos visuales son buenos, pero se echaba de menos algo más... y sobre todo, un poco de mejor argumento, o quizás un desenlace más profundo, dado el mensaje a transmitir. El hijo de Will Smith sobra bastante, de hecho siempre que sale son las peores escenas de la película y las más aburridas. En definitiva, una peli que no es buena pero tampoco mala. A mí me ha gustado. Pero que dejen de hacer remakes por favor...
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